Él es Gonzalo, un turrialbeño que desde niño no tenía en mente otra cosa que ser diseñador de modas.
“Desde niño le hacía la ropa a las barbies de mis hermanas. Como a los nueve años ya hacía diseños. Y desde los 14 años ya me pagaban por hacer prendas”, me detalló Gonzalo en una plática que tuvimos en su casa y donde nuestra compañía era un hermoso traje de novia.
Como sabía lo que quería, Gonzalo no dudó en estudiar diseño de modas. Así lo hizo en el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) hasta graduarse en el 2006.
Su proyecto de graduación contó con ocho outfits de mezclilla, marca, Only Jeans, que aún trabaja. Sin embargo, su amor por los vestidos era más fuerte que la propia mezclilla.
“También fui modista por un tiempo. Pero llegó ese momento donde uno quiere más y fue cuando comprendí que nadie lo iba a hacer por mi así que me metí en un curso de cómo planear mi empresa y aquí estoy con mi marca de vestidos: Gonzalo de Sousa”, me explicó.
Cuando conversábamos de vestidos de novia, Gonzalo se emociona de manera diferente.
“Lo que pasa con los vestidos de novia es que son como el punto máximo al que llegan las mujeres entonces es el punto máximo al que también uno llega como diseñador”, añadió.
¡Me sentí identificada al máximo con sus palabras!
Retos. Las pruebas siempre vienen de la mano de nuestros sueños.
Su primera pasarela fue en Costa Rica Fashion Week 2006, donde presentó una colección pequeña porque no tenía los recursos suficientes.
“Muchas veces destiné la plata que tenía para comer para seguir confeccionando y ahora me siento súper orgulloso de lo que viví”, me contó este luchador.
Aún con las dificultades su madre ha sido su fiel compañera y quien creyó en el desde pequeño.
¡Las mamás!
CRFW. Para este Costa Rica Fashion Week 2014, Gonzalo creó una colección llamada Cosmos y que vino con su madurez.
“Yo lo que quise trasmitir es que si podemos vivir con moda, la moda no es ser plásticos ni dejar de vivir, por el contrario es aprovechar los recursos que el planeta nos da.
“Los vestidos representaron los mares, los volcanes, las flores, las rocas, la naturaleza verde. Y los vestidos de novia simbolizaron el cielo y la lluvia”, me explicó este creativo
Es un diseñador muy enfocado en lo que quiere y sobretodo que le apasiona ver los ojos iluminados de las mujeres cuando reciben sus vestidos.
Él me dijo: para mi la mujer es el mejor lienzo que hay para trabajar. Y yo simplemente guarde esa frase en el alma.
Fotografías de pasarela por Diego Rodríguez.