Sé que les he posteado bastantes fotos de las invitaciones de mi boda. Y es que, además de sentirme emocionada, quiero contarles que las hice yo.
Les comenté en un post de boda anterior (aquí) que debemos explotar nuestras destrezas para hacer algo para nuestra boda y ¡que mejor si con eso nos ahorramos un gasto!
Pues me fui con una amiga, Rebeca, en busca de los materiales. Compré un papel morado tornasol, un encaje color vainilla y otro morado.
Hice los siguientes rectangulos en el pliego morado y con las medidas justas para doblarlo como verán más adelante.
Una amiga de la revista en la que trabajo, Mariela, me ayudó a cortarlas perfectas. Las wedding planners y mi amiga Adriana llegaron para ayudarme a pegar los encajes (primero el vainilla y después el morado).
¡Todo iba de maravilla!
Y para la parte interior, mi amiga Rebeca (y Heriberto) me ayudaron a diseñarlas, imprimirlas y cortarlas. ¡No tienen idea lo que les agradezco!
Y así fue, toda una noche pegando en el interior la información, ¡hasta que quedaron listas!
Es súper sencillo de hacer, para aquellas novias que quieran animarse y hacerlas. ¡Les juro que me ahorré bastante dinero!
Un beso,
Ari.
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