En jackets, jeans, camisas, shorts… Rotos, desteñidos, lisos… Son muchas las manifestaciones de la mezclilla, también llamada denim.
Toda mi vida he tenido algo de mezclilla. Aún hoy en día, además de los pantalones, tengo overols, jackets, chalecos, vestidos y shorts denim.
¡No puedo resistirme!
Y sé que muchos de ustedes tampoco. Lo cierto es que hay temporadas que los guardamos pero hay temporadas donde los volvemos a sacar. ¡Este 2015 es uno de esos!
Y para que no salgan corriendo a la tienda, les comparto algunas ideas para utilizar la mezclilla que tenemos:
1. Dejemos de lado el mito de que usar jeans y blusa, o camisa, de mezclilla es incorrecto. Es una gran idea combinarlos, preferiblemente en tonalidades o acabados diferentes para que ambos se noten.
2. Los jeans rotos continúan. Hay varias escalas de rotos, están los que son un pocos descosidos o desgastados y una delicadeza en lo roto: conocidos como frayed jeans. También, al otro extremo, están los grandes agujeros que dejan al descubierto las rodillas y parte de las piernas: ripped jeans.
3. Denim modificado. Consiste en intervenir una de nuestras prendas de mezclilla. Puede ser tiñendo o aplicando tachuelas, encajes o texturas. Da un resultado creativo, diferente y único para lograr un look vintage o rocker.
4. Estilo boyfriend (chicas): son jeans holgados, desgastados y con los ruedos doblados. Aporta a tu look un toque masculino pero si lo complementamos con una blusa o blazer hasta nos veremos atractivas.
5. Overol denim: un símbolo de comodidad es el overol, y para lograr una apariencia más moderna podemos arrollar los ruedos, usarlos con tops, blusas de manga larga o corta, y algunas holgadas.
Plus. No olviden que también pueden jugar con otros elementos como jactes, shorts, vestidos, zapatos en denim, entre otros.
Un abrazo,
Ari.
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