A mí me fascinan los cumpleaños, en lo personal me encanta inventar qué hacer, estrenar algo de ropa, lucir radiante y desafiar los años!
Para este cumpleaños decidí estrenar un obsequio que me hizo una de las diseñadoras que conocí en Perú.
Ella es Karla Lecaros (con quien salgo en una foto más abajo) una señora guapísima que le apostó a su marca Sasá y a la confección de prendas grandes.
“Todas mis piezas son únicas. Me especializo en tallas grandes pero con detalles coquetos. Evito crear ropa grande que solo busque ocultar los rollitos, por el contrario, busco resaltar ciertas partes del cuerpo y uso tips para que luzcan mejor“, me explicó Karla.
La idea nació confeccionando ropa para ella y sus amigas. Me encantó que para ser piezas más grandes le apuesta a los estampados, a los cortes, a las plumas y a la pedrería. ¡Arriesgarse!
Asimismo, no pude quedarme con la duda del significado de Sasá, a lo cual ella me respondió bailando con un movimiento de hombros: es pura alegría.
Para mi fortuna, Karla me obsequió una de sus piezas, ¡me cayó como anillo al dedo para mi cumpleaños!. Así que decidí estrenarla en una cena especial que tuve.
No les miento que me quedó un poquito grande, sin embargo, también me gusta usar ropa floja. La combiné con una enagua (Zara) y tacones negros, labios rojos , y le incluí un clutch que mi madre me heredó.
Sin duda alguna, sus piedras fueron lo que me hicieron brillar, apostarle a la alegría de la marca y de mi celebración.