¿Quién no ha caído al encanto de las sheet mask? Yo he sido fan de probarlas y acumularlas. Me gustan mucho porque me ayudan al cuidado del rostro, son fáciles de poner y puedo variar los esfuerzos por cuidar mi piel, es decir, hoy puedo usar una de colágeno, la otra semana una de hidratación y la otra de iluminación. Antes, para poder hacer eso, tenía que comprar tres frascos de cremas.
Pero es verdad que me he vuelto más selectiva. Las mascarillas con olores fuertes me abruman. Principalmente porque me gusta dejarme el liquido accionar en la piel una vez que remuevo la sheet mask.
¿Qué son las sheet mask?
Son tratamientos impregnados de concentrados en una laminita en forma de rostro. Cada una cuenta con ingredientes distintos que ayudan a proteger y estimular la piel del rostro.
¿Cómo se usan?
Se colocan sobre el rostro limpio. Se deja reposar 15 o 20 minutos. El líquido restante lo masajeamos sobre el rostro para su total absorción. Me fascina dejarlas en la refrigeradora y aplicarlas una vez estén frías; eso ayuda a la circulación y a los poros.
Tambien: No más puntos negros.
¿Cuáles hay?
Existen para muchas necesidades: ojeras, piel grasa, resequedad, piel grasa, piel mixta, para combatir puntos negros, entre otras.
¡La buena noticia!
En mi último viaje a Costa Rica me llevé algunas sheet mask y las dejé allá para una de ustedes. Sí, es un giveaway. Para participar dejen sus datos en este link: https://forms.gle/S246rQw9WPmsxAw46
Mucha suerte y con cariño inmenso,
Ari.
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